Por Amor a Dios

Por Amor a Dios

¿Me amas más que a cualquier otra cosa o persona?
Jesús dirigió esta pregunta a Pedro después de su resurrección.
Cada uno de nosotras tuvo que responder a esta llamada de Jesús de forma muy personal. No se trata principalmente de nuestro hacer, sino de nuestro ser, y vivirlo de forma muy práctica en la vida cotidiana.
Por amor a Dios, ese es la razón de nuestra vocación.

Hermanas Por Amor a Dios

¿Sin una carrera profesional?

Seguir una vocación por amor a Dios, sin la perspectiva de una carrera, sin estar casado, sin propiedad privada, es un gran desafío en nuestros tiempos orientados al consumo. Una vida comprometida en el seguir a Jesús no es necesariamente fácil, pero vale la pena.

Es inconcebible pensar que Jesús, el Hijo de Dios, anhela el amor de nosotros, los seres humanos; sólo Él puede colmar el anhelo más profundo de nuestros corazones y dar una alegría que nadie puede quitarnos. Por este amor, su Palabra se hace cada vez más preciosa para nosotros, creciendo así en nosotros el deseo de cumplir sus mandamientos.

Aprendiendo cada día, como lo señala la Palabra de Dios: Amar a Dios por sobre todas las cosas y a nuestro prójimo como a nosotros mismos.

Para profundizar en el tema lea los siguientes libros. Descárgerlos pulsando sobre la imagen.

¿Qué inspiro a los primeros cristianos para que dieran testimonio de su fe ante reyes y emperadores y para que soportaran las aflicciones, las pruebas y hasta la muerte llevando su mensaje hasta los confines del mundo.

¡Su profundo y gran amor por Jesús!
Hoy en día necesitamos de ese primer amor. Cada situación y aspecto de nuestra vida diaria nos ofrece la oportunidad de acercarnos más a Él y amarlo sobre todas las cosas.

Es un documento tierno y cálido, escrito con un profundo amor por nuestro Señor Jesucristo, el cual resplandece brillante en estas páginas. Es un llamado claro, para volver al “primer amor”.